Hace aproximadamente un mes mi empleador me ha ofrecido cambiar mi computadora del trabajo por una más nueva. En un primer momento lo dudé, pues me resultaba muy cómodo utilizar mi computadora personal -en modalidad BYOD-, mi Thinkpad X230, pero el recambio que me ofrecieron se veía tentador en especificaciones, pues sin dudas una ThinkPad E15 Gen. 2 (gama de entrada del año 2021) ofrece un rendimiento superior a la X230 (gama alta del año 2012).
Mis dudas estaban puestas en el equilibrio entre portabilidad y rendimiento, porque si bien la mejora en rendimiento es evidente (estamos comparando un Intel Core i5 de 3a. generación con un Intel Core i7 de 11a. generación) también es evidente el cambio en el tamaño de la pantalla, pasando de 12,5 a 15,6 plugadas, un tamaño que siempre me resultó excesivamente grande para una computadora portátil (mis anteriores computadoras han sido de 14 plugadas).
Consideraciones
El cómputo sin dudas ha sido el principal motivo del cambio, pues si bien como consultor/soporte/arquitecto de soluciones mi flujo de trabajo consiste mayormente en conectarme a servidores y redes remotas donde se ejecutan estas soluciones, tener la posibilidad de ocasionalmente correr máquinas virtuales de forma local es algo aprovechable, e inclusive la ejecución de herramientas para videoconferencias o el tener múltiples instancias de herramientas ofimáticas y de navegación web en simultáneo se ven beneficiadas con el poder de cómputo extra que supone el Intel Core i7-1165G7 que trae esta ThinkPad. La gráfica discreta también es una mejora considerable, pues además de poder utilizar la gráfica integrada en el procesador para la mayor parte de las tareas al contar con la tecnologíaa Optimus de Nvidia me permite alternar y ejecutar determinados procesos con la GPU Nvidia MX450 que ofrece un mayor rendimiento.
La pantalla de esta E15 esta no solo es más grande (algo no tan positivo para mí) que la de la X230, sino que la resolución de pantalla es Full HD (algo muy positivo), una comodidad de la que me resulta difícil prescindir en pleno 2021 y mi anterior Thinkpad del año 2012 no incorporaba. Por lo demás, también tiene un acabado mate y unos colores que me resultan agradables a la vista.
Sin dudas la portabilidad se reciente en la E15, la duración de la batería es menor y el peso es ligeramente mayor (en comparación es más grande pero sus componentes son más ligeros).
Otros elementos cambian un poco pero el balance en general es bueno: tiene menos puertos USB pero de mayor ancho de banda (incorpora un Thunderbolt 4 inclusive); el teclado no es retroiluminado, pero esto es algo que no he aprovechado tanto como creí en su momento; el touchpad es bastante mayor y resulta práctico usarlo, además de mantener el TrackPoint; es posible modificar la posición de la tecla Ctrl desde la configuración de UEFI y dejarla en una posición más natural, algo que se agradece; el sonido integrado tiene una calidad aceptable y la conectividad inalámbrica es moderna; la cámara incorpora una pestaña para cubrirla mecánicamente; incorpora un lector de huellas (spoiler: aún no funciona en GNU/Linux); y entre otras cosas que podría destacar, es algo más frágil que la X230 en su construcción -o al menos tengo esa sensación- pero para el uso que le doy al día de hoy es más que suficiente.
El sistema operativo: Arch Linux
Aprovechando el cambio de hardware también decidí cambiar el sistema operativo. Para el trabajo debo usar software privativo por lo cual una instalación totalmente libre de Debian o Trisquel si bien son mi preferencia en lo personal no son una opción viable aquí. No me extenderé mucho, elegí Arch Linux, pese al mito de que es más inestable que otras distribuciones por ser rolling release me ha dado buenos resultados en el trabajo con anterioridad, tiene un muy buen soporte y documentación para este hardware y otros beneficios de los que hablaba en el podcast.
Para ponerla en marcha ha sido suficiente con una instalación simple de ArchLinux con el escritorio y herramientas de Gnome, configurar Bumblebee para aprovechar ambas GPU, y TLP para una mejor gestión de la batería en el hardware Thinkpad, además de instalar aquellas herramientas que utilizo habitualmente para trabajar. Como comentaba, el único hardware que no funciona aún en GNU/Linux (no es un problema específico de ArchLinux) es el lector de huellas que incorpora, pero puedo prescindir de él sin problemas.
Lo que me gusta
- Cómputo: el procesador Intel Core i7 11gen. y los 16GB de RAM DDR4 ofrecen un excelente rendimiento en movilidad.
- Es liviana: no más que una computadora más pequeña, pero es posible llevarla en la espalda sin que suponga un problema.
- Gráfica discreta y tecnología Optimus: usar la mayor parte del tiempo la gráfica integrada y poder alternar a la MX450 cuando la necesito es fantástico.
- Pantalla: la resolución y nitidez de la pantalla están muy bien, es posible trabajar en espacios abiertos y luminosos sin dificultad.
- Almacenamiento: no lo mencioné, pero incorpora almacenamiento NVME, una tecnología que ofrece un gran rendimiento de lectura/escritura.
- Thunderbolt: aún no lo he aprovechado pero sin lugar a dudas es una característica positiva.
- Touchpad: el panel táctil tiene un buen tamaño y en conjunto con los gestos de Gnome 40 son una experiencia totalmente disfrutable. Casi mejor que el TrackPoint.
Lo mejorable
- Batería: aún optimizando un poco la instalación, en ArchLinux logro obtener algo más de 3 horas de batería, casi la mitad del rendimiento que me daba la X230.
- Tamaño: pienso que una E14 (pantalla de 14 pulgadas) o inclusive alguna de menor pantalla serían una mejor opción para mí; pero esto es algo personal.
- Teclado: Lenovo parece seguir la tendencia del mercado incorporando teclados cada vez más finos y con menor recorrido, esto para alguien que gusta de teclados mecánicos es difícil de entender.
- Capacidad de almacenamiento y memoria RAM: un punto de entrada con 500GB de almacenamiento sería mejor, y pese a traer 16GB de RAM no es fácilmente ampliable por tener un solo slot (si no recuerdo mal).
Conclusiones
La Lenovo ThinkPad E15 Gen. 2 con procesador Intel es una excelente elección de computadora para trabajar. Por mucho cariño que le tengo a mi ThinkPad X230, el cambio tecnológico en los últimos 9 años es enorme y se siente, esta computadora es una puesta al día necesaria. Mi vieja computadora seguirá allí para usos personales, pero las tareas laborales se verán beneficiadas positivamente con este cambio.